3º día de Fiesta de la entrada (presentación) al templo de Nuestra Señora, la Santísima Madre de Dios y siempre Virgen María*

Domingo 23 de Noviembre de 2014 - Tono 3 - Eotina 1

3º día de Fiesta de la entrada (presentación) al templo de Nuestra Señora, la Santísima Madre de Dios y siempre Virgen María*

La Santa Iglesia conmemora hoy a san Sozón, mártir.

*La fiesta se celebra el 21 de Noviembre, pero por razones pastorales la celebramos hoy en nuestra Pro Catedral San Jorge.

 

"La entrada de la Santísima Virgen en el Templo de Jerusalén.

Cuando la santa y más pura niña María (Mariam o Miriam en hebreo) llegó a la edad de tres años, sus padres, los justos Joaquín y Ana, cumplió la promesa que había hecho a dedicar su hija a Dios (YHWH).  El ir en procesión con una compañía de las doncellas con antorchas, presentaron su niña en el Templo de Jerusalén, donde el Sumo Sacerdote Zacarías la tomó bajo su protección  y cuidado. Le da la bendición de ella con estas palabras, el famoso cántico de Simeón: “El Señor ha glorificado tu nombre en todas las generaciones, es en ti que Él revelará la redención que él ha preparado para su pueblo en los últimos días. Luego trajo a la  niña en el Lugar Santísimo, algo completamente inaudito, en la Ley sólo el sumo sacerdote podía entrar en el Lugar Santo, y sólo una vez al año en el Día de la Expiación.

 (En la imagen de la fiesta, las doncellas que acompañan a la Madre de Dios se muestran con la cabeza descubierta, como era costumbre que las muchachas solteras, pero la Madre de Dios a sí misma, aunque sólo tres años de edad, lleva la cabeza cubierta de una mujer casada para mostrar su total consagración a Dios).

 La Santísima Virgen vivió en el Templo por  los próximos nueve años, dedicándose a la oración.

 La Santísima Virgen vivió en el Templo para los próximos nueve años, dedicándose por entero a la oración.  En este momento se alcanza la pureza absoluta del corazón, conforme con el pregón ordenado, y llamado  del Altísimo, se convirtió en su propia persona, en  el cumplimiento y la condensación de toda la fidelidad de Israel. San Gregorio Palamas dice que, cuando la Madre de Dios entró en el Santo de los Santos, el tiempo de preparación y el ensayo de la Antigua Alianza llegó a su fin para Israel, que ya estaba listo, en la Santísima Virgen, para dar a luz al Salvador.

 Cuando María se acercó a la edad mínima para contraer matrimonio,  fue confiada al castísimo viudo San José para protegerla y custodiarla como celador de la Sagrada Familia.

 (El Prólogo dice que una vida de virginidad intencional era desconocida entre la cultura hebrea, por lo que el justo José llevó a cabo las formas de matrimonio, para no causar escándalo en el pueblo.)

"Por tanto se alegra  la Iglesia y exhorta a todos los amigos de Dios a  dejar entrar  en el templo de su corazón, para hacer preparativos para la venida del Señor por el silencio y la oración, en el retiro de los placeres y preocupaciones de este mundo. "  (Synaxarion)