miércoles, 30 de diciembre de 2015

El Homoforio, La protección de nuestra Doncella María

Su Beatitud ATHANASIOS 1º ALOYSIOS y S E Rev Kyrilos
 
Con suma alegría recibimos a carta Encíclica de su Beatitud ATHANASIOS 1º ALOYSIOS
que como Patriarca y Padre,  atiende a sus hijos en sus necesidades espirituales, porque habla desde el corazón. Nos llena de animo y gozo el compartir las expectativas para este nuevo año que empieza, en la visión de una Iglesia creativa, crística,  que solo busca afianzarse en el misterio de la Redención.
La gran alegría-noticia gozosa,  llega en el anuncio de los santos Ángeles,  a los pastores y a un niño que solo corre como anticipo de la misión.  Su Beatitud ATHANASIOS 1º ALOYSIOS, y  S. B. Yuri Emigidiusz Ryzy (Q.E.P.D),  nos dice "hijos" y nos encomiendan siempre la oración,  practica y sincera, no olvidándose de aquellos que "están en la intemperie, los que sufren el frio y la sed, en nuestra amada Bielorrusia, la persecución y proscripción". Por este motivo agradecemos al Dios Padre de todos nosotros,  por la oportunidad  de esparcir este mensaje de salud, de alegría,  de paz, en su totalidad. El Señor quiere que imitemos su misericordia, que lo vivamos en el amor, el diácono sirviendo, el sacerdote escuchando y celebrando la Liturgia y el obispo/eparca, cargando a la ovejas, cuando lleva el epitrajelion y el homoforio.
 
 
 
Nos acobijamos al amparo del Altísimo, para que nos proteja como un poderoso árbol protector, de la lluvia y de los vientos, cerca de la fuente de agua cristalina, donde crecen pastos verdes y fuertes para alimentarnos de la palabra de Dios. No perdamos tiempo, estudiemos, recemos, meditemos y sepamos siempre perdonar y de este modo estaremos imitando a Nuestro Señor, que siendo Dios se anonadó en un pesebre,  para que nosotros podamos ascender al cielo.  Menos ruido, mas silencio, en la oración como contemplación, y en esa soledad  ya estaremos rezando al niñito Jesús
La Sagrada familia


El arbolito de Navidad, que nos recuerda la Presencia
 
La misericordia que se predica en este año, nos recuerda como Jesús toma nuestra miseria y nos regala la piedad en el perdón, convirtiéndose en vida, del fruto de las entrañas de María doncella, la salvación que da sentido a esta Navidad en un giro positivo en al esperanzan que brota del costado de Cristo.

El Jesús de la misericordia


Pedimos por el establecimiento  de  metas en nuestra amada Lima, en la visión teocrática,  en  la visión de Wladyca Francisco  de Perú y de S E Rev padre Pavel, de México en su gran amor a la Divina Liturgia, que inspira a los sacerdotes para seguir mejorando en el ministerio.
S E Rev Padre Pavel. de Mexico



sábado, 19 de diciembre de 2015

LA BIBLIA.


“Grandes cosas ha hecho Dios con

 nosotros y por eso nos alegramos”
                                                                                                                           (Salmo 126, 3)
LA BIBLIA. 
                                                                                                          Contribuido por Stephanos
La Biblia, en un lugar noble, nos recuerda siempre la Presencia de Dios
 
La palabra de Dios llega por medio de sus servidores, el Evangelio de hoy, edifica y nos cambia y ese Dios que  se oculta en la palabra,  el misterio, se nos da a conocer en la dirección espiritual, en las homilías, y por supuesto en la lectura de la Santa Biblia.
La educación y la pedagogía que es impartida en el Patriarcal Ateneo san Marcos, nos brinda las herramientas para poder defender y explicar la fe expecta, ortodoxa que proviene del depósito de la fe. Esto se debe a que  “la Palabra”, el Evangelio no está encadenada, se necesita la actitud de estar dispuesto a querer entender. Esta palabra, bondadosamente el Padre Dios, la descubre a los humildes, sencillos,  más que a los doctos  (San Mateo 11, 25). San Juan Crisóstomo, nos recomienda amar la palabra de Dios,  palabra no difícil, sino profunda. Requiere atención.
Dios nos muestra el camino, su palabra es una luz  para nuestra vereda.
 
Jesús desde su pedagogía divina, nos ilustra la enseñanza en parábolas, para edificación,  de la espiritualidad del fiel, para madurar en la fe. Las Santas Escrituras, se valora el estudio, la búsqueda sincera de saber dar una respuesta cimentada, para no olvidarnos de Dios (Deut 8, 11-20). Encontramos siempre consuelo al leer la Biblia, la colección de librillos, se lo divide en Antiguo Testamento y el Nuevo Testamento.
El examinar la Biblia, colocarla en un lugar noble, encender una velilla,  la lectura diaria, la reflexión, y puesta en común, en la lectio divina es propio de la piedad.
El rezo,  al comienzo de la lectura, pedirle a nuestro santo patrono y al ángel guardián, es signo de querer vivir la cruz. Dice el Señor que es“ manso y humilde”, su dulce rostro, su ser es la mansedumbre personificada.
Una hermana nazarea meditando las Escrituras "en voz baja"
 
La memoria hilo conductor, la biografía, la identidad del yo, alma eterna, es lo que da el sustento a la individualidad y trascendencia de la persona, hablamos con Dios, nos llenamos de Dios, único trascendente y eterno.
¿Cono llegamos a conocer a Dios? Para entrar en la proximidad con Dios, debe aprenderse a confiar con los que han ya estado, enterarse  en las Escrituras, y darse cuenta que así es imposible explicar cómo es el color naranja a un ciego, o el sabor a alguien sin lengua, para acercarnos “un  poco” a la majestad de Dios, hay que dejarse penetrar por la jaris, la adquisición del Espíritu Santo, es el único propósito el alma arderá y saltara para darlo a conocer. Él es el que actúa, el  único propósito es Cristo, la centralidad es Cristo, no es por los méritos propios.
La formación, en una pedagogía significativa
En la lectura de la Biblia nos ponemos en contacto con el amor, si ese amor empieza por lo terrenal, o lo relacionamos con lo “mundano” pierde el rico  significado.
Compartimos ese amor que no encadena, fruto del Amor donado (porque Él nos amó primero), San Máximo el Confesor nos dice que: “El amor es manifestado no solamente por medio de la distribución de las propiedades personales, sino aún más, por medio de esparcir la palabra de Dios y obras de caridad” (Capítulos sobre el Amor 1.26). Oír la palabra de Dios, es el que se ha dejado penetrar por la virtud, conquistado el corazón,  pues se experimenta que no puede comparase a nada, lo sobrenatural,   que se cree.
 

Solo el corazón tiene la capacidad de recordar (1 Cron 28, 9). En el Santo Evangelio según San Marcos 4, 13, nos advierte que el razonamiento,  el escuchar cuidadosamente,  nos ayudará a percibir las manifestaciones divinas   en  la intuición y experiencia. Ahora amorosamente Su Beatitud  SB YURI, Emigidiusz Ryzy, siempre decía que el sacerdote tiene que estudiar la Biblia y saber la Liturgia, pidamos al Señor que escuche los ruegos de este santo varón, que ya descansa en su seno, que hónrennos su memoria y siempre recordamos que compartimos el mismo cielo, como esta tierra. Amíñ.